Gonzalo Betancur Urán
Llegué sin conocer la dirección.
¿Fue un tanteo sin ton, ni son, ni razón?
Pero, al fin, llegué.
Sin equipaje apropiado
Con reservas
Con preguntas
Con mil kilos de después.
Pero, al comienzo, llegué.
¿Para qué volver atrás?
¿Atrás de qué?
Lo que importa es el vivir.
Sin derrotas y sin sol.
Sin la brújula del día.
Sin el sol de la semana.
Sin ayer y sin mañana.
Como la ola que va
y se olvida de volver.
Sin memoria. Sin afan.